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6º
Congreso Misionero Latinoamericano
(CoMLa 6)
1º
Congreso Americano Misionero (CAM 1) |
I.- Diálogo ecuménico e interreligioso
II.- Iglesia Local
III.- Nueva Evangelización
IV.- Vocaciones Ad Gentes
V.- Nuevos Areópagos
VI.- Obras Misionales al Servicio
VII.- Inculturación
VIII.- Kerygma
IX.- Espiritualidad
X.- Animación Misionera
CONCLUSIONES FINALES
I- Diálogo ecuménico e interreligioso
Jueves
- Profundizar la propia experiencia de encuentro con Cristo, comulgando con sus sentimientos y actitudes, fortaleciendo la identidad humano-cristiana para favorecer el encuentro con el otro.
- Promover una Iglesia que sea una escuela de escucha y aceptación de la pluralidad, formándose en los principios del diálogo Ecuménico e interreligioso.
- Favorecer y acrecentar en las Iglesias locales actitudes y experiencias conjuntas: Oración común, promoción de la dignidad humana, valores fundamentales, adecuando el lenguaje en Verdad y Caridad.
- Evitar prejuicios y actitudes excluyentes que nos encierran en nosotros mismos.
Viernes
- Despertar un ardor misionero que, inspirado en la mística de las primeras comunidades cristianas, anuncie con audacia al Cristo que hemos visto y oído.
- Concientizar sobre la importancia del diálogo como elemento constitutivo de la misión de la Iglesia, creando escuelas de formación específica, favoreciendo secretariados diocesanos.
- Crear una cultura de solidaridad frente a la globalización, formando la conciencia misionera que testimonie el compromiso con los marginados.
- Renunciar a los miedos e inseguridades que nos impiden abrirnos a nuevos horizontes y contextos eclesiales, sociales y culturales.
Sábado (laicos)
- Promover una mayor participación de los laicos en los niveles de diálogo interreligioso para trabajar conjuntamente en el desarrollo de los aspectos: social, cultural, económico, etc.
- Tomar conciencia como laicos de nuestra responsabilidad de estar llamados a trabajar corresponsablemente con los consagrados y ministros ordenados compartiendo decisiones y proyectos para fomentar el ecumenismo y el diálogo interreligioso.
- Potenciar las virtudes humanas: sinceridad, humildad, paciencia, discernimiento, etc... evitando actitudes de superioridad e inferioridad para entablar un verdadero diálogo.
- Lograr que se intensifiquen los canales necesarios para transmitir de forma comprensible (versión popular) los acuerdos o avances del diálogo teológico (Iglesia Luterana y Anglicana).
II.- Iglesia Local
Jueves
PROMOVER en las IGLESIAS LOCALES instancias de FORMACIÓN y ANIMACIÓN misionera en todos los ámbitos eclesiales para REVITALIZAR el KERIGMA.
ESTIMULAR, promover y crear conciencia de SOLIDARIDAD MISIONERA entre las iglesias particulares, RESPONDIENDO al llamado de la MISIÓN AD GENTES.
PROMOVER desde las CONFERENCIAS EPISCOPALES un PROYECTO MISIONERO teniendo como punto de partida el PRÓXIMO AÑO JUBILAR.
EVITAR UN TRABAJO DESARTICULADO DE LAS FUERZAS MISIONERAS DE LA IGLESIA LOCAL, por ejemplo: que el envío de un misionero pase desapercibido en una comunidad diocesana; que al proyecto misionero sólo se lo identifique con algunos.
Viernes
- CREAR en los seminarios y facultades la CÁTEDRA DE MISIONOLOGÍA, en la que puedan participar también los laicos.
- RENOVAR el ARDOR MISIONERO en cada iglesia local, para responder al clamor del Espíritu hoy (Asia), SUBRAYANDO en todos los proyectos diocesanos y parroquiales la NATURALEZA MISIONERA y EVANGELIZADORA DE LA IGLESIA.
- PROMOVER una mayor PARTICIPACIÓN DE LOS FIELES en la MISIÓN DE LA IGLESIA, valorando el potencial evangelizador de la FAMILIA, de los JÓVENES y especialmente de la MUJER.
- EVITAR que las IGLESIAS LOCALES SE ENCIERREN en sus propias necesidades, haciendo de ellas una excusa para no llevar a cabo la misión "ad gentes".
Sábado (Laicos)
- Incentivar, acompañar, promover, facilitar, animar y apoyar a los laicos en su compromiso y servicio misionero, asegurando principalmente su formación y estabilidad económica para llevar a cabo la misión "Ad Gentes" y garantizar su reinserción en la Comunidad de Origen.
- Promover una Iglesia de "comunión y participación", favoreciendo el diálogo ecuménico e interreligioso y superando toda clase de clericalismo.
- Potenciar la cooperación misionera laical entre Iglesias Locales, nacionales e internacionales.
- Evitar la discontinuidad, cerrazón, instalación y el ser sólo "ejecutivos" de la acción misionera.
III.- Nueva Evangelización
Jueves
- Insistir y promover la formación del presbiterio, seminaristas, religiosos y laicos en el proceso evangelizador y kerigmatico, creando y valorando centros de formación misionera, para responder a las realidades y desafios del nuevo milenio.
- Promover una mentalidad abierta y un espíritu dialogante desde la pastoral de conjunto para lograr la unidad y un mutuo enriquecimiento en la Iglesia y con las culturas.
- Impulsar en la Iglesia americana estructuras de solidaridad, para responder, con clara opción a los Lázaros de nuestro tiempo.
- Aceptar la necesidad de conversión en nosotros, Obispos, Sacerdotes, Religiosos y Laicos, superando un modelo de Iglesia estática, para salir al encuentro de cada persona, familia y sociedad desde su realidad particular, como lo hizo Jesús.
Viernes
- Revitalizar el Kerigma y el testimonio de la Iglesia local, acentuando la esperanza, la pasión y el ardor misionero.
- Recuperar el valor evangelizador de la religiosidad popular en torno a la devoción de María como madre y esperanza liberadora de los excluidos de América.
- Impulsar y/o crear centros de comunicación y articulación misionera entre las Iglesias a nivel diocesano, nacional y continental.
- Revertir en nuestras Iglesias locales, el desaliento, la discriminación y el individualismo por la falta de una visión mas clara de lo que significa una Iglesia abierta a la misión Universal.
Sábado
(Laicos)
- Fortalecer y/o crear centros de formación misionera específicamente para los laicos que parta desde su realidad integral y sus necesidades de conocimiento a nivel doctrinal, bíblico, misionológico y humano, siendo estos centros accesibles para todos (costos, tiempos,...)
- Despertar y esclarecer en los pastores y en todo el pueblo de Dios el protagonismo del laico, tomando en cuenta sus iniciativas y participación, fomentando asi su coherencia de vida en la nueva evangelización dentro de su quehacer secular.
- Crear y/o promover equipos de coordinación misionera entre los sacerdotes, consagrados y laicos a nivel diocesano o nacional que integre: acompañamiento fraterno y formativo (hacia los laicos) y que recoja las iniciativas y experiencias del conjunto en su misión evangelizadora.
- Evitar el egoísmo, encerramiento, capillismos, etc. de los laicos y de toda institución católica que nos impida abrirnos al llamado de salir de nuestras fornteras.
IV.- Vocaciones Ad Gentes
Jueves
- Promover la formación misionera "Ad Gentes" en todos los niveles pastorales, dignificando la persona en un mundo globalizado respetando los valores culturales propios.
- Aprovechar las posibilidades de la globalización (MCS, Internet, Transportes) para que las iglesias locales se abran a la universalidad favoreciendo la creación de puentes de intercambio entre ellas.
- Favorecer, sobre todo los pastores, la creación de estructuras diocesanas de animación, formación, acompañamiento y sostenimiento de las Vocaciones Misioneras "Ad Gentes", tanto consagradas como laicas.
- Desarrolar nuevas propuestas pastorales para avivar la dimensión misionera del bautismo en orden a un auténtico testimonio de vida cristiana.
Viernes
- Apoyar, económica y espiritualmente, aquellas iniciativas de misión "ad gentes", tanto las ya existentes como otras nuevas, siendo esto responsabilidad de toda la Iglesia local.
- Hacer de la misión "ad gentes" un tema central en los consejos y asambleas pastorales parroquiales y diocesanas, que se vea plasmado en sus proyectos con referencia misionera "ad intra" y "ad extra".
- Concientizar sobre la corresposabilidad de la iglesia local con la iglesia universal, impulsando proyectos de iglesias hermanas u otros canales de intercambio.
- Buscar un nuevo ardor alimentado con una mística y una formación misionera (catequesis, misionología) que nos lleve a dar desde nuestra pobreza, la riqueza de la fe.
Sábado (Laicos)
- Respetar el llamado a la misión ad gentes, ad intra y ad extra, acompañando en el discernimiento al laico, favoreciendo la creación de un centro de formación misionera diocesana, regional o nacional, como ente jurídico (con administración y autofinanciamiento laical), asegurando los aspectos informativos y de crecimiento espiritual.
- Crear un boletín de información misionera a nivel local, nacional y americano, que contenga elementos de espiritualidad misionera, animación, formación, avisos, etc. donde todos los misioneros ad gentes laicos puedan compartir sus experiencias para crecer, suscitar y estimular estas vocaciones.
- Incentivar a los obispos a nombrar laicos para direcciones diocesanas de O.M.P. y delegaciones nacionales, impulsando así el protagonismo de la vocación laical misionera, respetando la identidad del mismo como tal.
- Promover constantemente el diálogo y la apertura hacia las demás religiones y culturas, mediante encuentros ecuménicos de laicos misioneros, para fortalecer la fraternidad entre iglesias.
V.- Nuevos Areópagos
Jueves
- Promover y apoyar los MCS como instrumento de evangelización masiva inviertiendo recursos en capacitación, concientización e infraestructuras.
- Apuntar a la creación de un organismo fuerte de comunicación católico masivo.
- Favorecer a los pobres el acceso a la tecnología para promover su desarrollo integral y así superar la exclusión.
- Transformar los MCS de la Iglesia en nuevos aereópagos acordes a los tiempos y a los destinatarios, creyentes y no creyentes.
Viernes
- Priorizar la creación de centros de formación misionera a nivel diocesano y/o regional que capacirten para la pastoral en las grandes urbes
- Asumir la misión a las grandes urbes como prioridad: mediante una pastoral encarnada en las distintas realidades, pequeñas comunidades, promoción de los ministerios laicales, celebraciones festivas, llegadas a los sectores más alejados...
- Mantener un ardor y pasión en el testimonio misionero, profundizando una espiritualidad centrada en la Palabra de Dios y en la Eucaristía, y alimentada por momentos fuertes de contemplación frente a la compleja realidad de los centros urbanos.
- Promover la cooperación e intercambio misionero entre las diócesis utilizando la comunión de bienes (material, clero, laicos y medios de comunicación social.)
Sábado
(Laicos)
- Promover y/o fortalecer el dialogo y trabajos en Equipo entre cleros y laicos para definir líneas pastorales que den respuestas frente a los nuevos areópagos.
VI.- Obras Misionales al servicio
Jueves
- Seguir impulsando el trabajo de concientización, crecimiento y responsabilidad misionera de todo bautizado en la Iglesia, a través de la Animación, Formación, Organización y Cooperación; con principal atención a los Pastores, Seminaristas y casas de formación, utilizando plenamente los medios de comunicación.
- Revisar y reactualizar las estructuras de las O.M.P., que permitan su inserción en la Pastoral de conjunto de la Iglesia local; para un mayor diálogo y mejor comunión entre los distintos responsables de la tarea misionera, para ayudar a que el anuncio del Kerygma sea respuesta a los desafíos que se viven en concreto.
- Acercar, facilitar y asegurar la formación adecuada, el acompañamiento y el apoyo económico para todo misionero, especialmente para los laicos. Un medio propuesto: crear un Equipo Nacional Itinerante.
- Evitar el riesgo del conformismo y la acomodación a un modo de actuar que se percibe en las O.M.P., no permitiendo que sea el único organismo exclusivo de la Animación Misionera.
Viernes
- Asumir como Laico, el protagonismo de la misión. Y siendo éste, fruto de una formación integral, pueda ser partícipe real, en la toma de decisiones.
- Favorecer y valorar la disponibilidad del Laico, en su protagonismo misionero, contando con el apoyo y reconocimiento de Obispos y Sacerdotes.
- Prever la reinserción integral del Laico misionero, al regresar de la misión ad gentes.
- Ayudar a despertar al laicado misionero en la comunidad, mediante una propuesta fuerte de crecimiento en su espiritualidad misionera, que le permita, a través del reconocimiento de sus debilidades y fortalezas, asumir su compromiso en la misión ad gentes.
Sábado (Laicos)
- Asumir como Laico, el protagonismo de la misión. Y siendo éste, fruto de una formación integral, pueda ser partícipe real, en la toma de decisiones.
- Favorecer y valorar la disponibilidad del Laico, en su protagonismo misionero, contando con el apoyo y reconocimiento de Obispos y Sacerdotes.
- Prever la reinserción integral del Laico misionero, al regresar de la misión ad gentes.
- Ayudar a despertar al laicado misionero en la comunidad, mediante una propuesta fuerte de crecimiento en su espiritualidad misionera, que le permita, a través del reconocimiento de sus debilidades y fortalezas, asumir su compromiso en la misión ad gentes.
VII.- Inculturación
Jueves
- Actualizar las estructuras eclesiales, en todos sus niveles, impulsando espacios de reflexión y formación, en las distintas instancias, para una evangelización inculturada.
- Reconocer y promover los valores y riquezas de la cultura de cada pueblo, semillas del Verbo, en actitud de escucha y respeto.
- En el contexto de globalización, nos urge priorizar la opción por los pobres y excluidos, promoviendo una pastoral y celebración de la Fe que asuma y exprese su cultura.
- Evitar el avasallamiento cultural, y toda actitud fundamentalista.
Viernes
- Asumir en la pastoral de conjunto a la misión, como dimensión esencial, animando acompañando, soteniendo económicamente las vocaciones ad gentes, en los distintos estados de vida.
- Promover la palnificación de la pastoral orgánica en un proceso participativo que garantice el protagonismo.
- Abrir espacios para la participación activa de la mujer, de los afroamericanos, indígenas, pobres y otros excluidos en la toma de decisiones pastorales, en la reflexión y en la vida de la Iglesia.
- Favorecer la reflexión y la práxis que permitan a las Iglesias particulares celebrar y vivir una liturgia profundamente inculturada.
- Esta nota no pertenece a las conclusiones, parte de una reflexión del equipo del centro: Sugerimos revisar la realización de las celebraciones litúrgicas del congreso para que sean festivas e inculturadas.
Sábado (Laicos)
- Impulsar el rol del laico en el proceso de inculturación para que, asumiéndolo, se transforme en evangelizador de los diversos ambientes, impregnando de verdades cristianas las decisiones socio- político- culturales de su ámbito de actuación.
- Tomar conciencia de la importancia de la formación integral del laico como misionero, creando centros específicos para tal fin, y procurando un trabajo en equipo, en orden a la misión ad intra y ad extra.
- Impulsar la vocación profética del laico, para anunciar el Evangelio; y denunciar los antivalores existentes en todas las estructuras, incluso las eclesiales, afrontando los inconvenientes y desafíos de la globalización.
- Nexo. Conclusión exclusiva de Seminaristas: Potenciar e incluir la impronta misionera en las distintas áreas (Humana, pastoral, intelectual, espiritual) de la formación inicial para el sacerdocio.
VIII.- Kerygma
Jueves
Para retomar el kerigma en un mundo globalizado, proponemos:
- ANUNCIAR explícitamente a Cristo a todos para que se encuentren personalmente con Él, y enamorados de Él se comprometan en su seguimiento con acciones concretas.
- REAVIVAR el espíritu misionero a partir de una experiencia personal y comunitaria de Cristo muerto y resucitado, para dar testimonio con la propia vida con ardor, audacia y alegría.
- FORMAR agentes evangelizadores para que asuman el primer anuncio, teniendo en cuenta el desafío de la inculturación y de la exclusión de los más pobres.
- EVITAR confundir el kerigma con la catequesis y reducir la evangelización a la sola sacramentalización.
Viernes
Para retomar el kerigma en la iglesia local proponemos:
- RENOVAR el ardor misionero de todos: obispos, sacerdotes, consagrados y laicos para que asumamos la misión universal como eje de las propuestas pastorales a partir de las riquezas de nuestros pueblos resaltando la dimensión mariana.
- CREAR equipos, talleres y/o centros de formación misionera para laicos, religiosos y sacerdotes que permitan acoger, animar y acompañar a los evangelizadores del primer anuncio.
- PROMOVER acciones concretas de solidaridad fraterna y recíproca de bienes y recursos entre las Iglesias locales.
- EVITAR reducir la acción misionera universal a los problemas de la Iglesia local: clericalismo, centralización, postura estática.
Sábado
(Laicos)
Para llevar el primer anuncio a todos proponemos:
- PROMOVER una mayor conciencia de la dimensión misionera en todos los niveles de la Iglesia y del protagonismo de los laicos en la misión.
- CONSOLIDAR nuestra vocación misionera a través de una formación integral de los laicos por medio de la creación de institutos que no sólo preparen sino que acompañen el caminar de la misión.
- POTENCIAR los equipos misioneros de las comunidades locales o crearlos donde no existan, a fin de apoyar al misionero - especialmente al laico- en todos los aspectos.
- BUSCAR mayor unidad a través del verdadero diálogo, testimonio y servicio con todos los sectores de la Iglesia.
IX.- Espiritualidad
Jueves
- Promover y fortalecer la formación espiritual misionera de todo el Pueblo de Dios, con atención especial a los laicos creando centros de formación, conforme a las distintas realidades.
- Nutrir la espiritualidad misionera en la experiencia (personal y comunitaria) con Cristo, insertada en la realidad de los pobres y no creyentes, aprovechando la intercomunicación entre pueblos y culturas.
- Acrecentar la conciencia de que todo bautizado es misionero, alimentándola con el testimonio de mártires y santos.
- Evitar una espiritualidad cerrada e individualista, que lleve a crear divisiones y dicotomías entre Fe y vida.
Viernes
- Hacer crecer el ardor misionero en las Iglesias locales, rescatando y potenciando los valores sociales y culturales a la luz de la Palabra de Dios.
- Valorizar la dimensión misionera de la oración y el sacrificio, siendo dóciles al Espíritu Santo y contemplando las actitúdes y ejemplos de María.
- Promover la Espiritulidad misionera en la Iglesia local, revitalizando los organismos existentes (por ejemplo: O.M.P.), para que animen toda la Pastoral en vistas al Tercer Milenio.
- Evitar, en los Pastores y en los demás miembros del Pueblo de Dios, actitudes y conceptos que reduzcan la misión a simples prácticas superficiales y como algo exclusivo de algunos grupos.
Sábado
(Laicos)
- Insistir para que los pastores acompañen permanentemente en la formación y espiritualidad misionera de los laicos.
- Promover la conciencia de pertenencia del laico a la Iglesia, ayudándonos a crecer en el compromiso, en la mantención espiritual y material de ella, y en su responsabilidad en la misión de la Iglesia local y ad gentes.
- Promover que los laicos, desde la espiritualidad misionera seamos testimonios de unidad junto a consagrados y cada uno poniendo sus dones al servicio de la comunidad.
- Tomar conciencia de la necesidad de que el envío de misioneros se haga en equipos (sacerdotes, religiosos/as, laicos/as) para favorecer la riqueza espiritual de la misión.
X.- Animación Misionera
Jueves
- Impulsar la formación y la animación misionera para todos y en todos los niveles, especialmente en los seminarios, Institutos y casas de formación, cursos y experiencias misioneras, ya que ellos como líderes y/o pastores conducirán al Pueblo de Dios.
- Aprovechar las facilidades ofrecidas por la globalización (rapidez de la información, acercamiento entre personas y grupos) para desarrollar la animación misionera teniendo en cuenta la dignidad y solidaridad humana.
- En la Iglesia particular: favorecer la organización de equipos de animación misionera que promueva especialmente la Infancia, la Familia Misionera y cualquier otra iniciativa.
- Evitar la falta de cooperación, la indiferencia y la pasividad de todos los que invisten alguna jerarquía.
Viernes
- Revitalizar el ardor misionero mediante: mes misionero, tiempos litúrgicos fuertes, testimonios y experiencias misioneras, cursos teórico-prácticos en parroquias, catequesis parroquial, congresos, celebraciones de envío y la presencia de institutos misioneros.
- Asumir e incorporar en la Pastoral Ordinaria el proyecto de Iglesias hermanas, para la cooperación misionera, respetando las culturas y favoreciendo la misión Ad Gentes.
- Organizar la pastoral de conjunto de la Iglesia local de manera que la animación misionera sea eje transversal de toda actividad evangelizadora.
- Cuidar que no decaiga el entusiasmo en la Animación Misionera por falta de una conversión permanente, dado que el ardor misionero nace de una experiencia de Dios, personal y comunitaria.
Sábado
(Laicos)
- Crear en las Iglesias Locales un consejo o equipos de Laicos para la animación, formación, y proyección de acciones misioneras, sobre todo resaltando la importancia y el protagonismo de la familia misionera.
- Propiciar la creación de un fondo económico para las misiones destinados a sostener los emprendimientos de la animación y las demás tareas relativas a la misión, sobre todo AD GENTES.
- Difundir la importancia que tiene en la Iglesia el laico consagrado (pertenezca o no a un Instituto) en la animación misionera, a través de la predicación u otras formas de promoción.
- Evitar que la animación misionera se vea afectada por una inadecuada inculturación y por la ausencia de diálogo interreligioso.
Consigna
1) Leer atentamente:
- las Conclusiones Finales del Congreso Americano Misionero
CAM1 (páginas 8 a 11 de la cartilla de Conclusiones).
- las Conclusiones del tema que le tocó al grupo del Congreso Americano CAM1 (esta hoja).
- las Propuestas surgidas del 2° Congreso Misionero de Salta Co.M.Sa.2 (pág.4 punto3 y pág.5 punto2 de la cartilla de Conclusiones).
2) Elaborar propuestas concretas para los Grupos Misioneros de Salta a nivel Arquidiocesano, a partir de las conclusiones de ambos Congresos para el año que viene.
CONCLUSIONES FINALES
1.-Experiencia de Cristo:
Profundizar la propia experiencia de encuentro con Cristo, comulgando con sus sentimientos y actitudes, fortaleciendo la identidad humano-cristiana, para favorecer el encuentro con el otro.
2.-Formación:
Impulsar la formación y animación misionera para todos, y en todos los niveles, especialmente en los seminarios, institutos, parroquias y casas de formación. Incorporar la dimensión misionera en toda la catequesis.
3.-Iglesia local: estructuras para la misión.
Favorecer y articular las estructuras de animación, formación, acompañamiento y sostenimiento de todas las vocaciones misioneras "ad Gentes" (ad intra y ad extra).
Revisar, actualizar y dar a conocer las OMP, de manera que favorezcan su inserción en la pastoral de conjunto de la Iglesia local; para un mayor diálogo y mejor comunión entre los distintos responsables de la tarea misionera.
4.-Anuncio del kerigma:
Despertar un ardor misionero que, inspirado en la mística de las primeras comunidades cristianas; anuncie con audacia que Cristo ha muerto y resucitado y está vivo con nosotros (kerigma).
5.-Misión ad gentes
Promover que la iglesia local en su conjunto, a partir de sus pastores, asuma la responsabilidad misionera ad gentes, de manera que la animación misionera sea eje transversal de toda actividad evangelizadora.
6.-Globalización
Aprovechar las posibilidades de la globalización (MCS, Internet, transportes) para que las iglesias locales se abran a la universalidad, favoreciendo la creación de fuentes de intercambio entre ellas.
En respuesta al aumento de personas y grupos excluidos, fortalecer y promover los valores y riquezas de la cultura de cada pueblo, a partir del respeto por la dignidad de cada persona humana, imagen de Dios.
7.-Medios de comunicación social.
Teniendo en cuenta a los destinatarios, creyentes y no creyentes, de la evangelización, promover y apoyar los MCS, invirtiendo recursos en capacitación; concientización e infraestructuras.
8.-Diálogo ecuménico e interreligioso.
Favorecer y acrecentar en las Iglesias locales experiencias conjuntas con otras confesiones cristianas y religiones: oración común, promoción de la dignidad humana, valores fundamentales.
9.-Opción preferencial por los pobres
Impulsar en la Iglesia americana estructuras de solidaridad para responder, con clara opción, a los Lázaros de nuestro tiempo.
10.-Pastoral urbana
Asumir como prioridad la misión a los grandes centros urbanos, mediante una pastoral encamada en las distintas realidades: pequeñas comunidades, promoción de los ministerios laicales, celebraciones festivas, llegando a los sectores más alejados.
11.- Pastoral orgánica
Vivir la misión como una escuela de comunión y participación, poniendo en común los dones recibidas según las distintas vocaciones (laicos - individualmente o en familia -, consagrados/as, ministros ordenados) de manera que la colaboración entre los diferentes miembros abra a un impulso misionero renovado.
Promover la planificación de la pastoral orgánica, en un proceso participativo que integre a todos los bautizados.
Concientizar sobre la importancia del diálogo como elemento constitutivo de la misión de la Iglesia, promoviendo una mentalidad abierta y un espíritu dialogante, desde la pastoral de conjunto.
12.-Liturgia.
Favorecer la reflexión y la praxis que permita a las iglesias particulares celebrar y vivir una liturgia profundamente inculturada.
13.-La mujer.
Abrir espacios para la participación activa de la mujer en la reflexión, en la toma de decisiones pastorales, y en la vida de la Iglesia.
14.-Los niños.
Promover dentro de la Iglesia local y universal la Infancia Misionera y otras iniciativas que buscan impulsar en los niños desde pequeños la participación en la misión de la Iglesia.
15.-Iglesias hermanas.
Concientizar sobre la corresponsabilidad de la Iglesia local hacia la Iglesia universal y promover la cooperación e intercambio misionero entre las diócesis, utilizando la comunicación de bienes (material, clero, consagrados, laicos y medios de comunicación social).
16.-María.
Contando con el auxilio de María caminamos hacia un nuevo despertar de la conciencia misionera de nuestra Iglesia americana. Ella nos acompaña en este impulso de conversión, comunión, y solidaridad, mientras nos repite el llamado del Hijo: América. con Cristo, sal de tu tierra.
PROPUESTAS
"Estoy seguro de que e1 celo pastoral de los obispos y de los demás hijos de la Iglesia en toda América sabrá encontrar iniciativas concretas, incluso a nivel internacional, que lleven a la práctica, con gran dinamismo y creatividad, estos propósitos misionales" (IA, 74)
- Promover que las Iglesias locales en América concreten PROYECTOS MISIONEROS como manera de celebrar el Jubileo.
- Incentivar a las Iglesias locales para que formen, envíen y sostengan EQUIPOS DE MISIONEROS formados por laicas/os, consagradas/os y sacerdotes que lleven el Evangelio ad gentes, más allá de sus fronteras.
- Crear en cada nación o región, CENTROS DE FORMACIÓN MISIONERA, caracterizados por un espíritu de oración, reflexión y trabajo en equipo, para laicos, sacerdotes, seminaristas y cansagrados/as; que a través de una fuerte experiencia de Cristo preparen testigos capacitados para una evangelización actualizada
- Crear un fuerte ORGANISMO DE COMUNICACIÓN CATÓLICO MASIVO a nivel de América.
MENSAJE AL PUEBLO DE DIOS
Del 28 de septiembre al 3 de octubre de 1999, en el umbral del tercer milenio, nos hemos reunido en Paraná (Argentina) para la realización del VI Congreso Latinoamericano Misionero (COMLA VI)
Por primera vez fueron invitadas las Iglesias de Estados Unidos y Canadá, dando así origen al primer Congreso Americano Misionero (CAM 1).
Los participantes fueron 3000 adultos y 300 niños de la Infancia Misionera provenientes de América del Norte, Centroamérica y Caribe y América del Sur, junto con representantes de Africa, Asia y Europa.
El tema del Congreso fue "CRISTO, VIDA Y ESPERANZA PARA TODOS LOS PUEBLOS" y su Lema: "AMÉRICA CON CRISTO, SAL DE TU TIERRA"
Los participantes hemos proclamado con fervor la presencia de Cristo en nuestra vida y necesidad de anunciarlo a todos.
Sin embargo, mientras nos preparamos a celebrar con entusiasmo en el próximo Jubileo los 2000 años del nacimiento de Jesús, constatamos que las dos terceras partes de la humanidad todavía no lo conocen y que en nuestro mundo, llamado occidental y cristiano, se difunde el secularismo y una mentalidad individualista y relativista que lleva a la indiferencia.
La actual situación se hace más difícil por tos cambios introducidos con la llegada de la globalización.
Reconocemos que la misma facilita el proceso de unidad de los pueblos, un mayor acceso a la información; realiza un mejor servicio a la familia humana y puede ser muy útil a la evangelización.
No obstante denunciamos con preocupación muchas consecuencias negativas, sobre todo en sus aspectos culturales y económicos.
Nos duele el vacío espiritual de muchas personas, una nueva escala de ideales, la pérdida de valores autóctonos, provocando la reacción de los fundamentalismos y de los nacionalismos (y una escalada de la cultura de la muerte).
Nos escandaliza la brecha creciente entre los pocos ricos y los muchos pobres, que pone en peligro la paz del mundo y advertimos además con preocupación las consecuencias negativas de esta situación; que repercuten, grave y peligrosamente, en especial sobre los excluidos; los amerindios y los afroamericanos
Por otra parte estamos convencidos que la respuesta a estos desafíos es el anuncio de Cristo como Señor y Salvador de todos, quien nos revela el rostro amoroso y misericordioso de Dios Padre. El mundo lo pide y los cristianos debemos saber ofrecerlo.
Hemos escuchado en estos días los testimonios ofrecidos por los misioneros: obispos, sacerdotes, consagrados/as, laicos, familias, contemplativos, niños.
Nos han manifestado el secreto de su acción evangelizadora realizada con variadas actividades en distintos lugares del mundo.
Nos han contagiado su ardor misionero y como ellos
Nos sentimos en primer lugar seducidos por Cristo y enviados por El, el misionero del Padre. Como los apóstoles decimos: "No podemos callar lo que hemos visto y oído"
Nos sentimos enviados por la Iglesia, sacramento de Cristo, que es esencialmente misionera
Nos sentimos testigos del amor de Cristo y de la Iglesia en su servicio sobre todo a los pobres y marginados económica, social y religiosamente
Queremos prolongar la encarnación de Jesús en la cultura de cada pueblo, entrando en diálogo con ella, enriqueciéndola con la levadura del Evangelio, asumiendo sus aspectos positivos y defendiéndola del peligro de su eliminación.
Para estos valores estamos dispuestos a entregar nuestra vida denunciando los males que destruyen la dignidad del hombre y proponiendo a todos la plenitud de la vida humana en Cristo
Todo esto nos exige un camino de santidad personal vivido en la cotidianidad, con la conciencia de colaborar activamente en la construcción del Reino de Dios en todo el mundo con la inquietud del apóstol Pablo "Ay de mí si no evangelizara"
De esta manera somos conscientes que ofrecemos a la sociedad, redimida por Cristo, la posibilidad de una solución a los graves problemas que la asechan y aquejan, entre ellos las luchas por distintas convicciones religiosas y los enfrentamientos étnicos y culturales
Después de haber compartido estas vivencias nos dirigimos:
- a todo el pueblo de Dios y le pedimos que revitalice su conciencia de que ser miembro de la Iglesia es ser esencialmente misionero, ya que "Las perspectivas universales de la Iglesia deben ser las perspectivas normales de la vida cristiana"
- a los laicos les recordamos su responsabilidad de colaborar con la misión evangelizadora de la Iglesia con su oración, sacrificios ayudas de solidaridad y disponibilidad a ser enviados a anunciar el Evangelio "ad gentes" si sienten este llamado divino
- a los jóvenes en particular Les invitamos a ponerse como los apóstoles a la escucha del llamado de Jesús y con el profeta Isaías decir: "heme aquí Señor, estoy dispuesto, envíame. .. " (Is. 6,8)
- a los niños les agradecemos por su activa participación que dieron por primera vez a este Congreso Misionero y les exhortamos a seguir colaborando con el mismo entusiasmo que han demostrado.
- a las familias las alentamos a favorecer las vocaciones misioneras de sus hijos y a estar abiertas a un eventual llamado a una colaboración directa para la misión.
- a quienes viven la vida contemplativa les expresamos que consideramos muy importante su entrega y todos los misioneros los sienten cerca de su trabajo apostólico y cuentan con su oración constante.
- a los consagrados y consagradas los animamos a hacer presentes los valores del Reino con su compromiso profético en el mundo, según su propio carisma y las necesidades más urgentes de la Iglesia y de la sociedad.
- a los seminaristas les pedimos que adquieran un conocimiento de los problemas y de las necesidades de la Iglesia universal y del mundo, manifestándose dispuestos a entregar su vida para el anuncio del evangelio sobre todo en los lugares donde Cristo todavía no es conocido.
- a los sacerdotes los exhortamos a vivir la dimensión misionera universal que han recibido con su ordenación sacerdotal y estar dispuestos a ir dónde son más urgentes 1as necesidades de la Iglesia.
- a los Obispos los animamos a meditar junto con su presbiterio las palabras de Puebla.: "Nosotros mismos necesitamos misioneros, pero debemos dar desde nuestra pobreza" (D.P. 368) completadas por la afirmación de Santo Domingo (I25) "No puede haber Nueva Evangelización sin proyección hacia el mundo no cristiano", conscientes que
"la fe se fortalece cuando se comparte".
- También nos dirigimos a los responsables de los Medios de Comunicación Social, convencidos de la importancia que tienen para hacer conocer, con una información objetiva, los desafíos del mundo de hoy y las propuestas que, para solucionarlos, ofrece la Iglesia. Sólo en Cristo, Palabra de vida eterna, el hombre encontrará el camino de la plena realización personal y del cambio social que necesita.
Pedimos a María de Guadalupe, Patrona de América, que trajo al nuevo continente el mensaje de fraternidad universal en el respeto de las culturas locales, que nos dé
- la esperanza de superas las dificultades que encontraremos en el cumplimiento de nuestras responsabilidades en los umbrales del tercer milenio.
- el coraje de ser constructores de un nuevo mundo en el amor y la solidaridad.
- el ardor para anunciar el Evangelio de la. vida a todos los pueblos de todos los continentes.
Paraná (Argentina) 3 de octubre de 1999