¿Supiste ya la

Buena Noticia?

 Dios habla de muchas maneras. Tal vez hoy te está llamando a través de este folletito. ¿Te animas a escucharlo?

1. DIOS TE AMA COMO PADRE

 

El te dice hoy y siempre: "Eres precioso a mis ojos, eres valioso y te amo… No temas que Yo estoy contigo (Is 43,4-5). Mi amor de ti no se apartará (Is 54,10) ¿Se olvida acaso una madre de su hijo? Pues, aunque ella se olvide, yo no te olvidaré ¿Se olvida acaso una madre de su hijo? Pues, aunque ella se olvide, yo no te olvidaré (Is 49,15)".

El te hizo a ti (Is 44,2), hizo para ti un mundo hermoso (Gn 2,4-8) te ha dado todo lo que tienes para que seas feliz, porque te ama (Jer 31,3).

El amor de Dios no es un amor "afectivo", de besos, caricias o abrazos. Es un amor "efectivo" que se demuestra con hechos concretos: El te creó a ti, creó todo lo que existe, te dio la vida, te dio la salud, una familia... ¡Tantas cosas! En eso se manifiesta el Amor que Dios te tiene.

Te lo repito: ¡Dios te ama!

¿Qué te impide entonces experimentar el amor de Dios?

 

2. EL PECADO NOS HA SEPARADO DE DIOS

"Todos han pecado, por eso están privados de la gloria de Dios" (Rom 3,23) Dios nos creó para que fueramos felices, pero los hombres pecamos y nos alejamos de El (Gn 3,1-24).Por causa del pecado, se ha levantado un muro de separación entre Dios y la humanidad (Is 59,2).

Tú mismo puedes ver las consecuencias: Por todas partes ves injusticia, miseria, guerras, enfermedades...

Ante estas realidades, el hombre pretende dar soluciones. Busca su seguridad en el poder, en el tener, en el placer, en las drogas, en el alcohol, en el sexo... (Ef 2,1-3) Pero todas estas son soluciones imperfectas: falsas, superficiales, parciales y provisorias. Parecen solucionar las cosas por un momento, pero luego volvemos a sentirnos vacíos, y solos.... insatisfechos.

Entonces... ¿Todo está perdido?

 

3. ¡JESÚS NOS HA SALVADO!

¡ÉSTA ES LA BUENA NUEVA!

LA SOLUCIÓN DE DIOS

La única verdadera, radical, integral, definitiva.

¡Con su muerte en la Cruz y su Resurrección, Jesús nos ha salvado (Ef 2,4-6)! ¡Ha ganado para nosotros una nueva Vida!(Jn 10,10) "Jesús" en hebreo significa "Dios Salva". Jesús es Dios mismo que se hizo hombre para hacer que los hombres vuelvan hacia Dios. El ha venido al mundo para derriba el muro que el pecado había levantado entre los hombres y Dios (Col 1,20), para que podamos vivir nuevamente en su Amor y ser felices, como El siempre lo quiso.
 
 

Esto dice Jesús: "Yo soy el Camino, la Verdad y la Vida. Nadie va al Padre sino por mí" (Jn 14,6).

¿Y cómo puedo hacer mía esta salvación?

4. ACEPTA A JESUS COMO TU SALVADOR, CONVIÉRTETE Y VUÉLVETE A DIOS

Jesús se ha nos ha abierto nuevamente una  puerta hacia la salvación. El es el único camino para atravesar el muro que nos separaba de Dios (Jn 14,6). Pero ahora es necesario que tú decidas atravesar ese muro de separación y volver nuevamente a Dios. Pero el no impone nada a nadie, simplemente invita: "Mira que estoy a la puerta y llamo; si alguno oye mi voz y me abre la puerta, entraré" (Ap 3,20). ¿Vas a abrirle las puertas de tu corazón? Para ello tienes que creer en la Salvación que Jesús te dio (He 16:31), aceptar a Jesús como el único que te puede salvar, y convertirte (He 3,19): cambiar de vida, renunciar al pecado y hacer el firme propósito de vivir más cerca de Dios en la oración y cumpliendo su voluntad (Jn 15,14).

¿Qué esperas? ¡Decídete ahora mismo por Jesús! Ábrele tu corazón y tu vida!

 

5. PIDE AL ESPIRITU SANTO QUE VENGA A TU VIDA Y TE HAGA NACER DE NUEVO

 

Si ya has aceptado a Jesús como tu Salvador, has aceptado recibir la Vida Nueva que El te ofrece (Jn 10,10). Ahora necesitas nacer a esa Vida Nueva (Jn 3,1-5). Y Jesús nos prometió que sería el Espíritu Santo el que nos daría esa Vida (Jn 7,37-39)

Si no eres bautizado, por el Bautismo recibirás al Espíritu Santo, y si ya has sido bautizado, puedes pedirle al Espíritu Santo que venga a tu vida y renueve ese Bautismo que estaba dormido.

¡Pídele a Dios que te de su Espíritu Santo! (Lc 11,13) El te dará u corazón nuevo (Ez 36,26) y te dará fuerzas para perseverar en esta nueva Vida a las que has nacido (He 1,8).

¿Y después qué?

6. DIOS NO QUIERE QUE ESTES SOLO. INTEGRATE A LA COMUNIDAD CRISTIANA

 

Ahora que ya eres un hijo de Dios, has decidido aceptar a Jesús en tu corazón y has pedido al Espíritu Santo que venga a habitar en tu vida, solo te falta una cosa: integrarte a la comunidad de los que han sido salvados por Cristo (He 2,42-47).

Dios no quiere que sus hijos estén dispersos, sino que quiere que seamos una gran familia, un solo cuerpo (Rom 12,5). Por eso existe la Iglesia, para que todos los creyentes podamos permanecer unidos y apoyarnos los unos a los otros en nuestro caminar por esta vida, como hermanos, rumbo a Dios (Rom 12,6-21).

 

 

¡Decídete! ¡Acércate a la Iglesia Católica, y ven a formar la gran familia de los hijos de Dios!

- Misioneros de la Iglesia Católica de Salta -

Fuente de los dibujos: http://www.sinecentral.org/